Cuentan
que ocurrió el día 15 de Febrero de 1941. Lloviznaba desde primera hora de la
mañana apreciándose síntomas claros de inestabilidad. Aquel día, como tantos
otros, cuatro niños cuyas edades oscilaban entre los 12 y 14 años, con el consentimiento de sus padres y agobiados por la necesidad de aquellos años difíciles, se dirigieron andando hacia la frontera portuguesa. Su cometido era intentar conseguir
comida en el país vecino; principalmente arroz, azúcar y algo de pan, tratando
de alargar el escaso dinero del que disponían.
Realizada
la compra emprendieron el regreso hacia el pueblo. Arreciaba la lluvia y el
aire por momentos de forma alarmante. Llegó a ser de tal violencia, que hasta
se hacía difícil caminar. Empapados de agua, consiguieron llegar hasta un chozo
que encontraron a su paso por la zona de Cagapalitos, decidiendo guarnecerse en
el mismo. Cuándo se encontraban en su interior, una fortísima racha de viento
arrancó de cuajo su techumbre de palancas y retamas, quedando sólo el pedrizo y
los chicos acurrucados unos contra otros, aterrorizados y helados de frío.
El
padre de unos de los muchachos, ante la tardanza y gravedad de la situación,
salió en su busca. No consiguió encontrarlos, pero si vio a dos mujeres que
también volvían de la frontera. Una de ellas había caído al intentar cruzar un
arroyo, fracturándose una pierna. El hombre se tuvo que emplear a fondo para
poder socorrerla y trasladarla hasta una choza
en la que vivía otra familia.
Los
niños eran Tomás “Macadeo”, Manolo Núñez, Eugenio Santos y Antonio Pérez “capamelones”. --- sólo el último está todavía entre
nosotros--- La mujer de la pierna quebrada se conocía como tía Catalina “La
Rita”. El nombre de su compañera no se recuerda, pero su apodo era “La Garina”.
La
intensa borrasca cruzó la Península soplando de suroeste. En el término de
nuestro pueblo derribó numerosos árboles y tejados, siendo conocida esta
fecha en la historia de Encinasola como “El año del viento”.
Este mismo fenómeno sería el causante del
famoso incendio de Santander, en el que ardieron al completo 37 calles de su
centro.
Para consultar sobre
dicha borrasca y sus consecuencias en esa ciudad buscar: incendio de
Santander 1941 (ver fotos y amplia
información)
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